Los "minipisos" van a entrar finalmente en los planes de vivienda del gobierno español. Muchos se llevan las manos a la cabeza y se rasgan las vestiduras.
Pero la verdad es que si lo pensamos bien la idea no es tan descabellada. De hecho, los minipisos son una realidad desde hace tiempo en el resto de Europa. Incluso en España, los pisos no son tan grandes.
Por ejemplo, yo vivo en un piso de 72 m2 con mi madre y mi hermana. Aunque hasta que mi madre se separó éramos 4. Eso quiere decir que los m2 por persona eran: 72 (m2)/4 (personas) = 18 m2/persona. Y los minipisos son de 30 m2/persona. Osea, que a mí personalmente me parecen un auténtico lujo.
Lo que pasa es que del plan de vivienda lo único a lo que se le ha dado relevancia es a los pisos, por lo que da la sensación de que sólo habrán minipisos, y que hasta las familias de 10 miembros van a tener que vivir ahí. Y eso es mentira claro. Están destinados para jóvenes estudiantes o recién emancipados.
Y esto es muy bueno porque se promoverá la movilidad geográfica, no sólo para estudiar sino también para encontrar empleo. Por ejemplo, yo no encuentro empleo cualificado en Canarias. Pero claro, ir a la península a buscarlo me sale muy caro y no puedo. Pero si tuviera minipisos con alquiler barato, pues podría hacerlo. Podría ir allí, trabajar de cualquier cosa para pagarme el alquiler y la comida, y aguantar unos meses hasta que salga otra cosa mejor.
Publicado por Pestañín en 9:30 a. m.
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