Cine coreano: A tale of two sisters aka Dos Hermanas (2003)

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A tale of two sisters

Sinopsis:

Basado en un cuento popular coreano para niños, se cuenta la historia de dos hermanas que regresan al hogar con su padre y su madrastra, después de recuperarse de una tragedia ocurrida. La hermana mayor no soporta a la madrastra, mientras que la pequeña le tiene miedo.
Desde la primera noche empiezan a ocurrir cosas raras, como apariciones de fantasmas, ruidos…

Entonces la hermana mayor empieza a encararse con la madrastra, ésta a su vez empieza a molestar a la menor, siendo el padre un convidado de piedra a la lucha que va in crescendo.

La película es de miedo pero también tiene elementos de suspense. Tanto, que incluso casi me atrevo a decir que si le quitamos los fantasmas la película podría seguir funcionando, aunque se convertiría en predecible. Por desgracia el fantasma es el típico de pelo negro, pero aún así me cagué de miedo.
Siempre he pensado que los detalles son los que hacen buena una película. En esta ocasión me gustó la lucha de poder entre madrastra e hijastra por la casa (y sospecho que también por el padre). La escena cuando las hermanas se arropan en la cama es fabulosa, se “respira amor”.

Sobre las cuestiones técnicas, pues casi lo que digo siempre, fantástica en todos los aspectos, aunque no soy ningún entendido. Los paisajes fabulosos, la fotografía bien, y la BSO acompaña perfectamente sin desentonar.

El reparto también se luce, con esas pequeñas grandes actrices.

Moon Geun-yeong es la hermana menor. Está maravillosa, haciendo el papel de espantada. No me extraña que se haya convertido en un ídolo juvenil allá en Corea (tipo Lindsay Lohan).
Im Soo-jeong hace de hermana mayor. Y se lleva la palma. Su papel es muy rico, hace de dulce madre para su hermana, actúa como una fiera ante su madrastra, y en los momentos dramáticos fabulosa.
Yeom Jeong-ah. La madrastra, sin duda también está a la altura del resto. Cumple con su papel de perraca a la perfección, de verdad que se hace odiar.
Kim Kap-soo. El que hace de padre. Comprendo que su papel no daba para más, pero es que aún así flojea demasiado. Sólo pone una cara en toda la película, una lástima que bajara tanto el nivel.

Mi recomendación es que hay que verla, la única película coreana de miedo que para mi gusto está al mismo nivel que los dramas o las comedias.

Más información en hancinema.net e imdb.com.

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